Después de las emociones... llegó la calma.

29/09/10 >> Después de dos jornadas "dinámicas" cargadas de palabras bonitas, alguna que otra lágrima y muchos sentimientos, hemos llegado al final del camino de la dinámica planteada por Antonio y que tantas buenas sensaciones nos ha dejado. Desde mi humilde punto de vista, dicha dinámica nos ha aportado muchísima fuerza, conocimiento más personal de todos los compañeros, ya que esta dinámica ha sacado el lado más sensible y emocional de cada uno de nosotros al estar en una situación nunca antes expuestos, y sobre todo ha dejado claro el buen rollo y la energía positiva que se respira en la 4ª promoción del TSAFAD de Motril. Como he dicho en uno de mis turnos de palabra en clase, no es necesario y por otra parte no siempre es posible que los compañeros nos veamos fuera de clase; ya sea porque unos son de fuera, porque tengamos cosas que hacer, etc... para que la relación entre nosotros pase del compañerismo a la amistad, porque realmente, por regla general, nos vemos cerca de 7 horas al día, de lunes a viernes (más actividades extraescolares), que es tiempo más que suficiente para que se puedan producir lazos afectivos entre nosotros y sobre todo tiempo suficiente para compartir infinidad de momentos divertidos, discutir, pelearse y hacer las paces, vamos lo que pasa en las mejores familias. De igual forma quiero escribir algo que nos ha dicho Antonio y que estoy totalmente de acuerdo con él; no nos podemos llevar igual con todo el mundo dentro del grupo, ya sea por afinidad, compatibilidad de caracteres, situaciones que se den, etc... pero esto no quiere decir que nos tengamos que llevar mal. Por este mismo motivo no hay que forzar las cosas, es decir, había algunos de mis compañeros (que nadie se ofenda porque no es por nadie en concreto eh) que decían a otros con los que tenían poco trato o poca afinidad que intentaría que hubiera más y eso, y yo creo que no hay que forzar nada, las relaciones al igual que las situaciones se dan.
Esto, esto, esto es todo amigos.