6/10/10 >> El que avisa no es traidor... y es que ya nos avisó Antonio cuando nos mandó el archivo de la animación que le fuésemos echando un vistazo y lo trabajáramos. Pues bien, yo me lo leí por encima, es cierto, pero realmente no lo trabajé en demasía (quizás tenga aún falta de ritmo jaja), aún así creo que no he andado desencaminado a la hora del desarrollo en clase de la presentación.
Principalmente, debemos tener claro que la animación deportiva no deja de ser animación sociocultural en cuanto a características y finalidad se refiere, pero sirviéndose del deporte o actividad física para desarrollarla. La animación tiene muchos aspectos positivos (supongo que tendrá algo malo también, pero no lo diré porque sino no vendo el burro) para la persona que la practica; proporciona calidad de vida, bienestar, salud, alto grado de sociabilidad, etc...
En cualquier caso, para que la animación dé lugar a lo mencionado, es necesario que el animador o dinamizador plantee situaciones, actividades y en definitiva animaciones que se adapten a las circunstancias y a las personas que va dirigida.
Podría escribir de la animación y el animador muchas líneas más, pero creo que no se trata de eso, porque para eso ya están los apuntes, simplemente he querido dejar una pincelada de lo que estamos tratando de teoría y de lo que Antonio nos quiere transmitir.
Por el momento es todo, os dejo con el gran dilema: ¿Qué fue antes el huevo o la gallina?
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